Cork, 17 de noviembre de 2020
Ana Planas Domínguez
Trabajadora Social
Llegué a Irlanda hace ahora 10 años. Cuando me fui de España, salí literalmente con 5 maletas y arrastrando a dos bebés por el aeropuerto de Málaga. Sabía que no volvería, pero no quería admitirlo.
Mis primeros años fueron de adaptación, aunque pronto empecé a trabajar de ‘asistencia técnica’ para una gran empresa cerca de Dublín. ¡Yo! ¡De asistente! Tuvo su gracia, pero no mucha. En esta compañía conocí a una chica de Barcelona que era trabajadora social también, ambas decidimos investigar cómo podríamos ejercer nuestra profesión en este país. No parecía una tarea fácil.
Allá por el 2012, el organismo encargado de hacer los registros (nuestras colegiaciones) era CORU (https://www.coru.ie/). Tenía un sistema bastante extraño, que ofrecía una fecha determinada cada año para hacer el trámite. El problema era que ningún año era en la misma fecha y tenías que adivinarla −o tener la suerte de todos los dioses de acertarla. Nada fácil. No conseguí hacerlo ni en 2012 ni en 2013. Ese año me ofrecieron otro puesto de trabajo más interesante para mí en Cork. Se trataba de una empresa mejor, con más sueldo y sin duda en una ciudad más tranquila para mis dos chiquitinas.
Pasaron unos años y aunque no estaba mal (la empresa me gustaba, el trabajo un poco menos, pero bien), no era lo que yo quería. Yo soy trabajadora social, la vocación estaba en mí y en este país, cosa que me alegra mucho ver, la ayuda, el prójimo, el respeto y el darse la mano el uno al otro, es muy importante (como en los pequeños pueblos en España, donde la red de ayuda es vital). Por lo que volví a investigar y a centrarme en la conversión del título.
Reconocimiento de la titulación
Con sorpresa, esta vez no desagradable, vi que habían cambiado el sistema en CORU: el período de reconocimiento estaba abierto todo el año. Eso sí, el proceso para reconocer mi título era aún más complicado, tenía que pasar por varias fases. Así que me puse manos a la obra.
Lo primero que tuve que hacer fue mandar un mail a [email protected] explicando mi situación y lo que necesitaba hacer. Una vez hecho esto, hay que leerse un documento que se llama “Social Workers Registration Board Standards of Proficiency and Practice Placement Criteria” donde se explican los estándares para que el título sea reconocido (puedes revisarlo aquí https://coru.ie/files-recognition/standards-of-proficiency-for-social workers.pdf) y pagar las tasas de registro, algo más de 500 euros.
El siguiente paso es rellenar una aplicación electrónica y obtener todos los certificados correspondientes (laborales, educacionales y otros documentos relacionados con el trabajo social, tanto los originales como sus traducciones certificadas). En el formulario inicial que tenemos que rellenar hay un ‘check list’ de todos estos documentos. Además de enviar toda la documentación vía online, también se tiene que mandar de manera física. No es necesario trasladar los originales por correo, pero sí las traducciones certificadas y copias.
Una vez se ha enviado todo, lo revisan y este proceso, aunque en la página pone que tarda aproximadamente un mes, puede extenderse casi seis meses. Un agente indica si está todo en orden para seguir con los siguientes pasos o no. Si no lo está −que es lo más probable− te pedirán nuevos documentos, con su nuevo tiempo de espera. Cuando finalmente está todo, los archivos se mandan a la junta directiva, que se reúne una vez cada mes (pero nunca en la misma fecha). Este órgano decide si se procede o no, o si necesita algún paso más.
En realidad, hasta aquí la parte “fácil” porque en mi caso, la decisión de la junta era que necesitaba para completar el proceso de registro, hacer un examen y pagar otra vez las tasas de dicha prueba, que eran algo más de 400 euros o, en su defecto, hacer un período de adaptación.
Inocente de mí, decidí hacer el período de adaptación debido a que soy disléxica y teniendo en cuenta los nervios y que a pesar de que entiendo, escribo y hablo inglés, esta no es mi lengua materna y podría terminar seguramente escribiendo el Quijote o cualquier otra cosa porque no he entendido bien las preguntas. Así que opté por hacer las 540 horas de prácticas que me exigían.
Las prácticas
En 2018, en la empresa donde trabajaba decidieron “dejar a la gente ir” con una paga compensatoria, así que pensé que era el mejor momento y a finales de 2018 abandoné la empresa y me puse a buscar un sitio donde quisieran tenerme para hacer las prácticas. No sabía que esto iba a ser tan complicado, llamé a mil puertas, mandé mil emails, hablé con tanta gente que ni me acuerdo.
Un día, mi marido, que ha sufrido todo este proceso tanto o más que yo, me dijo: “¡Oye! ¿Por qué no contactas con esta señora que es la jefa de prácticas de la UCC (University College Cork)?”. Para ser sincera yo era muy reticente con esta idea porque es una persona con mucha responsabilidad y pensé: “¿qué caso me iba a hacer?”. Pues, ¡bendito sea y menos mal que le hice caso!
Esta señora en realidad estaba jubilada, pero recientemente, por lo que tenía todos los contactos frescos. Me dijo que no me preocupara, que sabía que mi situación era delicada, pero que iba a hacer todo lo que estuviera en su mano por ayudarme y dicho y hecho.
A las pocas semanas recibí un mail de ella diciéndome que me pusiera en contacto con el jefe de grupo de trabajo social de TUSLA (agencia de protección de menores) en Cork. Así lo hice y gracias a que existen personas como Padraig, fui a verlo y me dijo que empezara cuando quisiera.
Una vez encontrado quien podía supervisar las prácticas contacté de nuevo con el CORU para confirmarle los datos, me dijeron que no podía empezar hasta que la junta lo aprobara (Julio de 2018).
Así que empecé y tengo que decir que fue una experiencia increíble, unos compañeros inmejorables, un ambiente de trabajo excelente donde todos estaban más que dispuestos a ayudarme. Aprendí muchísimo sobre el sistema de trabajo social en Irlanda, a decir verdad, bastante diferente al de España. Sobre todo, en el área de atención al menor y a la familia.
En diciembre de 2019 terminé mis prácticas con mucha pena por dejar TUSLA, pero con muchas ganas de terminar el proceso ya y de poder ejercer. Padraig y yo hicimos el documento final que tenemos que presentar sobre las prácticas. Esto es un dossier con toda la documentación, más de 60 páginas de documentación y redacción, donde se me pedía hablar de los casos, el aprendizaje sacado y las reuniones con mi supervisor. Tardamos un par de meses en tenerlo completo, o al menos es lo que creíamos. Se mandó el documento para que la junta lo revisara cuando se reuniera (recordemos, una vez al mes no siempre en la misma fecha). Cuando lo revisaron parece ser que no les gustó, así que pidieron más información. Lo corregimos, me pidieron un marco teórico y más información sobre los casos, y volvimos a mandarlo. Con todo esto, ya estamos en plena pandemia, marzo de 2020.
Esta vez sí que les gustó el documento y por fin terminé el proceso de reconocimiento, pero ahora entramos en el proceso de registro, es decir, ya me aceptan que puedo ejercer como trabajadora social, pero tengo que registrarme, por lo que, en realidad, no puedo ejercer.
El proceso de registro
El proceso de registro es algo más ligero (sólo algo más ligero). Para ello he tenido que volver a rellenar una solicitud interminable y volver a mandar documentos, que ya había mandado antes −por lo que un truquito es pedir varias copias de las traducciones certificadas, por si acaso.
Uno de los requisitos para el registro es hacer lo que llaman “Garda vetting”, que es simplemente un registro de penales, pero al contrario que en España, este registro lo tienes que hacer con cada organización con la que quieras trabajar que así lo requiera. En el proceso de aplicación me hicieron varias preguntas, algunas ciertamente incómodas (más tarde hablaré de una de ellas en particular) y una prueba de que sé hablar y escribir inglés. La forma de demostrarlo era un examen de C1 o cartas de mis empleadores anteriores (a pesar de que cómo dije en un principio, llevo ya 10 años aquí). Así que les mandé todas las cartas y un examen que había hecho hace unas pocas semanas para entrar en la universidad.
Ahora mismo, me encuentro precisamente ahí, con la etiqueta de “aplicación incompleta” en mi página de CORU, esperando que revisen esas cartas y terminen el endiablado proceso que tanto tiempo y sufrimiento me ha costado.
Llegó el trabajo
Quiero terminar comentando esa “pregunta incómoda” que mencioné antes. En este momento estoy trabajando como investigadora para el ‘Royal College of Surgeons in Ireland (RCSI)’ con la figura de ‘Social prescriber coordinator o Community link worker’. Este trabajo no está regulado aún en Irlanda, pero sí en Inglaterra. Sin embargo, está en proceso.
Lo curioso de este puesto de trabajo, es que es, en realidad, parte de lo que hace un/a trabajador/a social, al menos en España. El trabajo consiste en que el médico de cabecera deriva un paciente que está en situación de soledad, ansiedad o socialmente aislado, siempre y cuando la situación no llegue a ser clínica (principalmente en el caso de la ansiedad).
Nosotros recibimos al paciente y evaluamos el caso y lo que hacemos es entender sus gustos, sus preferencias en el área social, sus ‘hobbies y tratar’ de buscarle los recursos necesarios para que pueda hacer aquello que busca o cubrir sus necesidades sociales con clubs, voluntariado que les pueda ayudar, asociaciones, etc. Este trabajo, según estamos revisando en el proyecto, tiene un enorme impacto en la salud del paciente, lo que reduce sus visitas al médico y el consumo de medicamentos.
La pregunta incómoda, era que cómo estaba ejerciendo de ‘Social prescriber’ si ellos aún no me habían dejado ejercer como trabajadora social. Es verdad, pero en el RCSI no me exigieron el registro en Irlanda, aunque sí el título español.
Como última nota, quiero comentar que el trabajo de ‘Social prescriber’ está en un momento en extremo importante y se están haciendo reuniones con el HSE (la seguridad social en Irlanda) por lo que es posible que esté asistiendo a la creación de un nuevo puesto en el área social y puede ser que sea un campo a evaluar por todas aquellas personas que no quieran pasar por todos estos años de reconocimiento.
Aunque el puesto aún no esté regulado ni hay muchos puestos abiertos, es algo que parece estar cambiando rápidamente y un campo más donde podemos ejercer nuestra profesión y lo que es más importante: ayudar a aquellos que más lo necesitan.
15 Comments
Me encanta, quiero más.
Muchas gracias Pilar!
Muchas gracias por contar tu experiencia! Ha sido muy interesante, y nos acerca a la realidad a aquellas q no sabemos dónde poner el huevo.
Tengo una pregunta, a ver si puedes ayudarme a resolverla, ¿existe en Irlanda una figura de trabajo social comunitario? ¿Cuáles serían sus funciones?
¡Hola Marina!
Muchas gracias por el comentario.
Respecto a tu pregunta, no, no existe el trabajo social comunitario. En Irlanda el trabajo social ocupa tres grandes áreas, Familia e Infancia que lo dirige el organismo oficial TUSLA, hospitalaria y vamos a decir “otros” que englobaría discapacidad, drogodependencia y salud mental.
Precisamente debido a este vacío, ciertas organizaciones tienen la figura de “Community worker” (existe formación reglada para ello) y luego de lo que yo estoy trabajando ahora, Community Link Worker, que digamos es el enlace entre los pacientes y la comunidad.
Espero haber respondido a tu pregunta pero si no, dímelo.
Un saludo
Quiero comentar por si interesa que ayer día 24-11 me confirmaron mi registro y ya puedo ejercer cómo trabajadora social en Irlanda. Ha sido un camino duro y largo pero al final se ha conseguido.
Hola Ana ,
Me alegro mucho !! me gustaria decirte que estoy ahora mismo en la fase del periodo de adaptacion,y que tambien me costo lo mio. Me encuentro en Galway, y quisiera preguntarte alguna duda que tengo sobre el proyecto final que tengo que entregar,Este es mi correo si tienes un ratillo y puedes escribirme te lo agradezco. [email protected]
Un abrazo
Chelo
¡Hola Ana! Yo estoy pensando en iniciar el trámite (honestamente no contaba con que fuese taaaan complicado) y estoy bastante perdida ya nada más empezar en cuanto a todo el papeleo que necesito recopilar. ¿Hay alguna manera de ponerse en contacto contigo vía email para ver si puedes ayudarme/orientarme con el trámite? ¡Muchísimas gracias de antemano!
Hola Patricia! perdona no he visitado el post muy a menudo. Si claro, puedes contactarme en [email protected] o [email protected]
Justo estoy buscando info y me encuentro con toda tu explicación. Mil gracias. Me quedan aún algunas dudas y quisiera pudiéramos hablar, te paso mi correo ahora. Mi marido es irlandés y desde hace un tiempo nos planteamos volver a Irlanda, despues de vivir 12 años en España pero todo el tema del registro, la homologación…me trae loca. Yo hice la diplomatura y no se si también podría tener problemas con ese tema.
Un saludo y mil gracias de nuevo!
[email protected]
Buenas Ana. Quer super útil tu información! Necesitaría poder contactar contigo! Te paso mi email y si tienes un huequito estaría encantada de poder hacerte algunas preguntas.
Un saludo!
[email protected]
Hola Clara! Te he mandado un mail 🙂
Buenas Ana.
Me parece muy interesante toda la información que has comentado aquí. En mi caso, me encuentro decidiendo si es mejor quedarme en España o intentar irme a Irlanda, aunque por lo que veo el proceso sería mejor comenzarlo una vez instalada allí.
Por otro lado, tengo una duda, ¿las prácticas que se deben realizar para poder homologar el título se realizan de forma gratuita?
Muchas gracias
Hola Sandra,
Las practicas son totalmente gratuitas.
Ana
Hola Ana!
Muchas gracias por contar tu experiencia! Me ha sido realmente útil. He estudiado Trabajo Social en España y ahora vivo en Irlanda y me estoy planteando realizar todo el proceso para poder ejercer aquí. Aun tengo alguna duda y me gustaría saber si podríamos hablar un poco más por mail. Mi mail es [email protected] Muchisimas gracias!
Buenos días, Ana, te he mandado un mail. Hablamos!
Ana